Últimamente me ha dado por dibujar cebras. Ya sé que en estas fechas apetece ver ilustraciones de paisajes nevados, ciervos, piñas, regalos y cualquier motivo o escena que nos recuerde a la Navidad.
Pero a estas alturas del mes necesitaba buscar otra fuente de inspiración. No fue algo premeditado, simplemente un día empecé a dibujar rayas y una cosa llevó a la otra. Ahora medio serengeti habita mi estudio.
Ya he compartido alguna vez mi pasión por el caballo. Pues estos familiares africanos son muy interesantes entre otras cosas por su pelaje y no he podido resistir la tentación de dibujar sus patrones rayados que hacen a cada individuo único dentro de la manada.
Con este ambiente navideño atípico me despido hasta la semana que viene.
¡Qué paséis unas Felices Fiestas!
El blanco y negro de las rayadas cebras combina perfectamente con el rojo vivo y el brillante verde de las poinsettias.
Nos lleva a otras realidades a la vez que le da un toque exótico a esta Navidad.
¡Maravillosa combinación!
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Mchas gracias! Como siempre, disfruto leyendo tus comentarios. Un beso muy fuerte
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El cuadro inicial de lomos de cebras, me recuerda un figurativo caleidoscopio, que partiendo de la realidad que representa, se convierte en un desierto de dunas sombreadas al Crepúsculo y culminadas por el ejemplar que las observa. Precioso!!!.
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Precioso tu comentario. Muchas gracias!! Un beso
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